El Instituto Psiquiátrico Dr. José Horwitz Barak, con sus raíces profundamente arraigadas en la historia de la salud mental en la comuna de Recoleta, Santiago, Chile, ha desempeñado un papel crucial en la atención y tratamiento de trastornos psiquiátricos desde su fundación el 8 de agosto de 1852.

Inicialmente conocido como la “Casa de Orates de Nuestra Señora de Los Ángeles”, el instituto fue una respuesta a la creciente necesidad de cuidado y tratamiento de personas con trastornos mentales. En sus primeros años, la institución enfrentó desafíos significativos, tanto en términos de recursos como de espacio. La falta de medios y el aumento constante en el número de pacientes marcaban una época en la que el cuidado de los enfermos recaía en unos pocos profesionales, algunos de ellos distinguidos profesores de la Escuela de Medicina de la Universidad de Chile.

Además, la dedicación de las Órdenes religiosas, como los Hermanos de San Juan de Dios y las Hermanas Hospitalarias de San José, desempeñó un papel crucial en la atención integral de los internos. La institución experimentó cambios a lo largo del tiempo, desde la tragedia del incendio en 1946 que destruyó gran parte del hospital y cobró la vida de 13 pacientes, hasta diversas renovaciones y cambios de nombre. En 1955, se convirtió en el “Hospital Psiquiátrico” y, finalmente, en 1983, recibió el nombre actual en homenaje póstumo al Dr. José Horwitz, quien contribuyó significativamente como jefe de servicio clínico y director del hospital.

Un aspecto notable de la historia del Instituto Psiquiátrico Dr. José Horwitz Barak es la presencia del Teatro Grez, construido en 1897. Este espacio se erigió como un lugar de entretenimiento y terapia para los internos, albergando conciertos, coros, actos músico-literarios, danzas y obras de teatro a lo largo de los años. El Teatro Grez, con sus murales pintados en 1904 y atribuidos a Pedro Lira y sus estudiantes, se convirtió en un testimonio visual de las expresiones artísticas que complementaron la experiencia terapéutica en la
institución.

A lo largo de su historia, el Instituto Psiquiátrico Dr. José Horwitz Barak ha evolucionado no solo como un lugar de tratamiento, sino también como un testigo de los cambios en la comprensión y el abordaje de la salud mental en Chile. Su compromiso con la atención médica de calidad y la innovación terapéutica ha dejado una marca indeleble en la comunidad de Recoleta, destacando la importancia de la salud mental en el desarrollo
integral de las personas a lo largo del tiempo.